Mare visita la espeluznante escena de un crimen antes de informar al enfurecido padre de la víctima. Cuando aparece un video de la noche del crimen, Mare interroga a los sospechosos en el caso y le da una fría bienvenida al detective del condado Colin Zabel, quien ha sido llamado para ayudar. Más tarde, Mare choca con los lugareños y expresa su preocupación por su nieto Drew a la luz de los problemas de salud mental de su difunto hijo.