Akane Sawai dejó de ir a la escuela debido a problemas emocionales. Ahora, se encierra en su habitación y solo se abre a su compañero de texto, Yoshiki Fukasawa, quien la visita constantemente para ver cómo está y la convence de ir a la escuela. Sawai se irrita por esto y su compañero de texto la convence de enviar a Fukasawa al infierno. Ella descubre que su compañero de texto es realmente Fukusawa y después de llegar a un entendimiento, Fukusawa convence a Sawai de que lo envíe al infierno.