Con cuatro brazos, Ten Shin Han tiene una clara ventaja sobre Goku. Ten agarra los brazos y las piernas de Goku y le da repetidamente cabezazos. Goku no se rinde y utiliza su cola para golpear y liberarse. Entonces, Goku decide emplear su propia técnica de ocho brazos, lo que iguala la tanda de golpes que se propinan uno a otro. Los dos siguen luchando hasta que se dan un fuerte golpe simultáneamente, que hace caer a ambos al suelo noqueados. La cuenta llega a ocho, pero se levantan. Goku hace caer a Ten al suelo y agarra sus piernas, provocándole gran dolor. Los brazos extra de Ten sujetan a Goku por el cuello, pero dichos brazos acaban por desaparecer al perder la concentración. Después de un largo esfuerzo, Ten Shin Han consigue lanzar y estampar al joven contra los muros del escenario. Goku se levanta, por lo que Ten decide utilizar la técnica mortal Ki-Ko-Ho, un ataque devastador ante el cual advierte al joven que lo esquive si quiere conservar la vida. Tras el impresionante ataque, se despeja la humareda y se descubre que el tatami ha desaparecido dejando un enorme agujero rectangular en el suelo. Goku parece haberse volatilizado con el ataque.